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La Aceptación

La aceptación es un concepto tan importante, que algunos lo han llamado “la  primera ley del crecimiento personal”. También es la última etapa en cualquier proceso de elaboración de duelo, de enfermedades crónicas y de crisis existenciales.

La aceptación consiste simplemente en ver algo tal como es, de la manera que es y decir “esto es así”.  Por lo tanto, no es una condición necesaria que lo apruebes, lo consientas, lo permitas, te deje conforme o resignado. La aceptación es decir: “Es lo que es…y…lo que es, Es”;  independientemente de que te guste o no.

Hasta que de verdad lo aceptemos todo, no podremos ver con claridad. Siempre estaremos mirando a través de los filtros, de nuestras creencias limitantes, de los “tengo que”,  “estoy obligado a”, y de los prejuicios.

Aceptando la realidad

Cuando la realidad se enfrenta con “nuestra noción de lo que la realidad debería ser”, la realidad siempre sale ganando, por supuesto y nos quedamos frustrados porque no sucedió lo que esperábamos.  Eso no nos gusta (es decir, tenemos problemas para acepar eso), de modo que o bien luchamos contra la realidad y nos desquiciamos, o huimos de ella y nos volvemos inconcientes. Si no aceptas totalmente la situación, exactamente como es, tendrás dificultades para cambiarla. Y lo que es más, si no aceptas la situación plenamente, nunca sabrás si la situación “debe” ser cambiada. 

La aceptación no es un estado de pasividad o inactividad. Es de hecho, el primer paso para actuar con éxito. Cuando  aceptas, te relajas, te entregas, te vuelves paciente. Y comienzas a ponerte en movimiento para dar el segundo paso fundamental para el cambio. Pero nada podrás cambiar si primero no aceptas lo que no funciona. Este es un estado  súper efectivo  para promover la participación y el protagonismo como punto de partida.  Ej.: - ante una enfermedad crónica- ,  cuando aceptas  tu diagnostico, lo incorporas, te comprometes y participas  activamente del tratamiento, se produce una Reestructuración Cognitiva; ya que es fundamental modificar creencias erróneas, relacionadas con la enfermedad. Esto sucede cuando la persona reconoce que su mejor oportunidad de felicidad futura radica en la comprensión de su condición y de su compromiso disciplinado de manejarla. De hecho, en muchos casos descubrieron que las personas con enfermedades crónicas tenían una actitud más positiva y consideraron que tenían una mejor calidad de vida, A partir de poner en practica la aceptación, lo cual implicaba el resultado de una gran batalla personal. que pudieron librar a partir de ver la  crisis como una oportunidad.

Parece tan obvio, tan sencillo y sin embargo, en la practica diaria, es una conducta muy difícil de aplicar; le damos tanta vuelta a las cosas, la miramos de aquí y de allá, y terminamos produciendo mas de lo mismo , la cuestión es que cuando la cosa se nos va de las manos o se sale de las reglas que nos planteamos, nos negamos a aceptarlas y pensamos …”no puede estar sucediendo esto…” y lo peor es que si no tenemos claridad de donde está el punto de partida menos podremos ver el camino que queremos recorrer. Y entramos en confusión, todo nos parece difícil…

La necesidad de la aceptación

A veces nos sentimos disconformes, (tontos, inseguros, feos, malos, viejos… ) comparándonos  con otros y queriendo  tener la misma aceptación . La necesidad de aceptación siempre será  origen de nuestro malestar y motivo de sentirnos rechazados.  Provoca que hagamos muchas cosas inconscientes e incoherentes  con la ilusión de ser aceptados. Cuando vivimos esperando la aprobación de los demás, actuamos de forma que nos acepten, muchas veces en contra de nuestras propias convicciones  y  con cada rechazo pensamos "no me quiere", "algo hice mal", "está enojado conmigo"... y todo se resume en: "no me aceptó". Somos felices cuando nos muestran una sonrisa, cuando nos saludan, cuando nos dicen "te quiero", cuando nos sentimos "aceptados", pero todo cambia cuando se siente un rechazo, aún cuando sea un rechazo imaginario. Muchas veces, hasta buscamos "donde está el rechazo" en algunas palabras que nos hayan dicho. Pensamos: "Me dijo, nos vemos después, no sé que quiso decir,… talvez quiso decir que ya no nos veamos"...: buscamos donde estuvo el rechazo y terminamos encontrando una razón para seguir sintiendo un vacío interior.

La verdad es que nuestra existencia esta determinada por la del otro y así nuestra personalidad, nuestros pensamientos, y nuestras acciones, son características que  se conforman socialmente. Pareciera como si hubiéramos aceptado una guía de comportamiento para saber que debemos hacer en tal o cual situación y a que debemos aspirar. Es por eso que con frecuencia reprimimos muchas características que nos hacen ser quienes somos para encajar con ese patrón al que supuestamente debemos imitar. Si sentimos que no tenemos lo que hay que tener o no calificamos para algo, nos sentimos avergonzados y nos criticamos con dureza. Pero…generalizar es un gran error porque cada ser humanos es un mundo aparte.  Buscar ser igual al otro nos despersonaliza. Nos criticamos con dureza cuando no hacemos “lo esperado”  en lugar de disfrutar de nuestra personalidad tal como es. Bajar un cambio y comenzar a aprender más de nosotros mismos  aceptando lo que es para poder ver lo que tenemos  que cambiar, hace la diferencia. Se vos mismo sin importar lo que los otros piensen, tu libertad termina donde empieza la del otro, así que mientras no hagas daño, sos libre para pensar, actuar y vivir sin vergüenza, además cada uno vive en su propio universo, y ese sentimiento de ser juzgados por muchas miradas,  no es tan duro como lo imaginamos. Confía más en vos. Si decidiste actuar de una determinada manera aceptalo. Es una forma de incrementar tu autoestima. Recordá que siempre lo que nos toca vivir es para crecer aprender y avanzar así que los errores úsalos para eso y no para criticarte.

Seguir buscando la aceptación en los demás es luchar contra una corriente imaginaria que nunca podremos dominar. Es buscar afuera algo que nos hace falta adentro de nosotros. ¿Por qué buscar la aceptación en los demás? Deja de hacer favores, olvídate si debes favores a los demás, si necesitas ser aceptado por otros, olvídate de la culpa, el chantaje y de todo lo que te haga daño. Cuando logres aceptarte tal como eres, desde ese momento dejaras de sentirte rechazado, y desde ese momento comenzarás a ser libre.

Aceptación a uno mismo

Dejar de buscar la aceptación en los demás es olvidarme si los demás me quieren o no me quieren, si los demás se enojan conmigo o están contentos, y animarme a preguntarme si realmente yo estoy conforme con lo que soy , con lo que hice de mi, ahí esta la clave. Muchas veces no tenemos la habilidad de responder a esta simple pregunta, ¿para donde quiero ir? ¿Que quiero que me suceda?  ¿Que es lo que quiero lograr en la vida? Tener claro el diseño de aquello que esperamos para nuestras vidas es central, por esta razón, en la consultas con mis pacientes tomo como eje conductor la elaboración de un proyecto de vida. Lograr definirlo nos pone en contacto con nuestros deseos más íntimos y también con nuestras limitaciones, trabas y conflictos que nos llevan a rever cuestiones irresueltas del pasado, pero sobre toda las cosas nos propone una mirada hacia el futuro. Cuando te comprometes con un plan de acción mirando un objetivo a alcanzar, la seguridad personal surge y se apoya en acciones concretas y en los logros que paso a paso vas adquiriendo en tu vida.  La necesidad de aceptación se deja a partir de cuando te aceptas y te dispones a luchar para tomar el control de tu vida. Paso a paso y con confianza te iras concediendo el permiso de buscar lo que necesitas del mundo, en lugar de esperar que alguien más te de el permiso para obtenerlo. Mi especialidad como terapeuta es ayudar a las personas que desean desarrollar una mayor eficacia personal, creando un puente entre lo que son y lo que quieren llegar a ser, te acompaño mientras caminas hacia tus objetivos y metas, observando y confrontando tus conflictos, miedos y angustias. Y revisando con que recursos contas y cuales te faltan desarrollar,  descubrirás nuevas opciones para afrontar los desafíos con los que te enfrentas día a día en tu vida. Yo creo que sí es posible cambiar, creo que uno se puede superar a si mismo y triunfar, creo que es posible disfrutar de la vida, creo en los sueños, en las metas y te puedo ayudar a conseguir las tuyas.  Cuando observas  tu forma de ser, tu forma de hacer y tu forma de sentir, experimentarás un proceso de cambio hacia un horizonte inimaginable lleno de posibilidades. Donde el pasado es una historia, el futuro es posibilidad pura y el presente es el aquí y ahora donde creamos los cambios.

Aprobar esta lección implicará una etapa de dolor emocional, de desapego, de trabajo duro sobre vos mismo. Como todo cambio trascendental en la vida, que desaparecerá como por arte de magia cuando lo aceptemos, lo superemos y podamos aplicar el nuevo conocimiento adquirido desde una postura mental más aperturista y tolerante. De hecho, la plenitud personal pasa por la adquisición de información y la revisión de ciertos conceptos básicos,  sin los cuales es imposible llegar a un grado elevado de madurez y bienestar personal o sentirse a gusto con uno mismo.

Lic. Beatriz Coco

Lic. Beatriz Coco
encuentrospositivos@hotmail.com
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